En la diversidad de prácticas sexuales, el bondage consiste en inmovilizar el cuerpo, o al menos una parte, de la pareja. En la literatura, y posteriormente en adaptaciones cinematográficas, posiblemente el personaje más famoso en realizar tal práctica sea Christian Grey, personaje masculino principal de la saga 50 Shades of Grey.

El señor Grey destacaba por sus gustos… muy particulares, algunos de los cuales comparte con diversas arañas que practican el bondage a una escala muy pequeña. Los machos envuelven con seda las patas de las hembras antes de la cópula, pero más que un juego se trata de un intento de sobrevivir. Y tener más éxito durante el apareamiento.

Juegos nupciales

El canibalismo sexual es un interesante método de selección sexual que se da en varias especies de artrópodos, incluyendo a muchas arañas. En estas especies las hembras tienden a ser más grandes y los machos deben recurrir a diversas estrategias – que dependen de la especie – para asegurar pasar sus genes a la siguiente generación.

La máxima exponente del canibalismo sexual es la mantis religiosa.Oliver Koemmerling /Wikimedia Commons

A pesar de lo terrible que nos puede parecer que la hembra devore al macho antes, durante o después del sexo, en realidad puede tener beneficios para ambas partes. Las hembras no solamente escogen al macho capaz de resistir esta prueba de fuego, lo cual probablemente sea indicativo de sus buenos genes – ya sea como cazador o de practicante de bondage -, sino que también están bien alimentadas de aquellos que no merecieron ser papás.

Pero también, como una madre bien alimentada es bueno para las futuras arañitas, en algunas especies los machos llevan un regalo nupcial, es decir, una presa para que la hembra consuma mientras el macho se aparea con ella. Si este regalo no es suficiente, la hembra bien puede comérselo a él.

Y existen casos donde el macho se deja comer, garantizando que la hembra no acepte a otra pareja.

Bondage arácnido

Otra estrategia que puede contribuir a la supervivencia del macho es el conocido como velo nupcialbridal veil -. Como mencionaba previamente, previo a la cópula ellos buscan enredar un par de patas de la hembra, tras lo cual detienen el segundo par con sus patas y siguen con la cópula.

Puedes ver este video: Pisaurina Mira Silk Wrapping

Por su parte la hembra, a pesar de estar enredada busca soltarse de sus ataduras, si lo logra y él no es suficientemente rápido lo más probable es que se convierta en su próxima comida. Pero si el bondage es lo suficientemente bueno, el macho puede aparearse nuevamente con ella y dejar más esperma, incrementando sus probabilidades de dejar más progenie.

Esta batalla se conoce en al menos 30 especies de arañas – un número pequeño considerando que conocemos alrededor de 46,000 -, y su éxito fue comprobado en un estudio realizado por investigadoras de la Universidad de Nebraska-Lincoln. Las Dras. Alissa Anderson y Eileen Hebetsen lo comprobaron en un experimento realizado en la especie Pisaurina mira.

Conocida como arañas de guardería se le suele confundir con la araña violinista.Judy Gallagher /Wikimedia Commons

Para ello bloquearon las glándulas tejedoras en los machos y dejaron que intentaran el ritual de bondage. Mientras que aquellos que tenían la capacidad de amarrar a las hembras evitaron ser comidos con una tasa de 70% de éxito, en los que no lo podían hacer telarañas solo el 10% de ellos logró evitarlo.

Este estudio también notó que las hembras parecen receptivas a la primera cópula, incluso colocando las patas de forma que facilite la tarea del macho, sin embargo, después de ello la hembra intentaba soltarse, aunque no quedó claro si para evitar más cópulas, para comerse a su pareja o ambas.

Los velos nupciales le permiten a los machos incrementar sus probabilidades de tener más descendencia, ya que intentarán copular en repetidas ocasiones no solo con una hembra, sino con las que puedan antes de que sus reservas de esperma se agoten.

Estas pequeñas Grey dependen de su telaraña para sobrevivir a una cópula peligrosa.Judy Gallagher /Wikimedia Commons

Estos bien llamados “conflictos sexuales” entre machos y hembras nos dan un pequeño gran ejemplo de la enorme diversidad de rituales que existen en la naturaleza y que contribuyen a la llamada selección sexual.

El hecho de que esta práctica sea tan rara en un grupo tan diverso como es el de las arañas es un misterio que las investigadoras y colegas alrededor del mundo probablemente quieran desenmarañar. Además, es probable que existan más arañas con esta práctica sexual tan particular, y no sería raro que alguna nueva especie reciba el nombre del Sr. Gray.

Referencias:

Por Agencias