México es una tierra donde lo sobrenatural tiene una presencia importante. Esto se puede ver en ciertas tradiciones folclóricas y también en la literatura, donde el vampiro ocupa un puesto peculiar. La literatura de género en México siempre ha estado presente a lo largo de diversas épocas, y el vampiro ha sabido encontrar un hueco en la mente de un grupo de autores que no han dudado en sumergirse en las tinieblas de este personaje. El vampiro es miedo, sangre y erotismo, pero también refleja el miedo del hombre por lo que hay más allá de la muerte. Revisemos algunos de los mejores libros sobre vampiros de la literatura mexicana, que han dejado una huella imborrable en la literatura mexicana de terror.
Vampiro
La ruta del hielo y la sal (1998)
José Luis Zárate
Esta novela no necesita mayor presentación: es la más importante que se ha escrito en México sobre el tema de los vampiros. Publicada en 1998, su autor adaptó uno de los capítulos de Drácula de Bram Stoker para relatar la travesía de siete tripulantes que viajan desde Bulgaria hasta Inglaterra a bordo del Demeter. Los hombres ignoran por completo que llevan a bordo a una de las criaturas más malévolas de la historia.
Durante el proceso de escritura de este libro, José Luis Zárate compró un mapa y lo dividió según las leyendas de cada una de las regiones por las que el Demeter pasaba. La tripulación del barco va explorando diversas historias de no-muertos que hacen de su viaje un oscuro infierno.
Vampiros: breve antología mexicana (1998)
VVAA
Alberto Chimal, Bernardo Fernández, Gerardo Horacio Porcayo, Gerardo Sifuentes y José Luis Zárate, cinco autores reconocidos en el ámbito del fantástico mexicano, se juntan para darnos una de las antologías más exclusivas en torno al mito del vampiro en México. Este libro editado por la Universidad Autónoma de Tlaxcala (en específico por el fanzine Azoth), hoy es considerado una rareza de las letras nacionales que nos da visiones distintas, pero complementarias, sobre los vampiros.
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La sed (2001)
Adriana Díaz Enciso
La obra vampírica de Díaz Enciso es injustamente una de las menos conocidas en las letras nacionales, aunque en los últimos años esta novela ha ido cobrando más lectores que se dan cuenta de su grandeza. Es La sed están todos los ingredientes de una gran historia de vampiros: erotismo, terror, la fascinante época victoriana y la tortura existencial de la vida eterna. Quien ame a los vampiros y la buena novela fantástica, no debería perderse esta lectura que se comienza con placer y se cierra con fascinación.
Los mejores libros sobre vampiros de la literatura mexicana.
Vlad (2004)
Carlos Fuentes
Fuentes, uno de los autores más importantes de la literatura nacional, nunca escondió su predilección por el género fantástico y los vampiros. Vlad es una muestra de ello: se trata de una adaptación de la novela Drácula, pero en suelo mexicano, lo que le da una visión única y refrescante a un relato netamente europeo.
Mundo umbrío (2019)
Jaime Alfonso Sandoval
Esta saga conformada por cinco libros tiene como eje central la historia de una adolescente, Lina Posada, que busca resolver las causas del asesinato de su madre, poco después de descubrir un espeluznante y revelador secreto de su padre. Esto la llevará a emprender una aventura por un mundo sombrío, lleno de criaturas extrañas. Aquí los vampiros llegan a tener los colmillos chuecos, le tienen más miedo al polen que al ajo por sus alergias, e incluso usan sandalias con forma de pollo.
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El vampiro del virrey (2023)
Héctor Zagal
El autor de esta novela nos transporta a la Nueva España, a una época oscura y llena de supersticiones, en la cual ocurre una serie de terribles asesinatos. Las víctimas presentan dos pequeñas marcas en el cuello, lo que hace sospechar a la Santa Inquisición que un vampiro merodea por las calles. El Santo Oficio pide ayuda a la astuta sor Filotea, al mismo tiempo que Ioan Apafi, príncipe de Transilvania, desembarca en el puerto de Veracruz. Esta imperdible novela mezcla la histórica con lo mejor de la narrativa detectivesca.
