En el futuro, el acceso en México a la medicina personalizada, los servicios biomédicos y otros avances en ciencias de la salud serán posibles gracias a la creación del Biobanco Mexicano, la primera base de datos genómicos a escala nacional, cuyos logros se han difundido en 2023, a través de la revista científica Nature

El Biobanco Mexicano es el resultado del trabajo de seis años de un equipo internacional liderado por el genetista Andrés Moreno Estrada, del Laboratorio Nacional de Genómica para la Biodiversidad (LANGEBIO) del Centro de Investigación y de Estudios Avanzados (CINVESTAV), con la participación de investigadores de Universidad Nacional Autónoma de México y la Universidad Autónoma Metropolitana, la Escuela Nacional de Antropología e Historia y los institutos nacionales de Salud Pública (INSP) y de Ciencias Médicas y Nutrición Salvador Zubirán (INCMNSZ), así como de universidades e instituciones científicas de Estados Unidos de América, Reino Unido y Australia.

Presenta CINVESTAV el Biobanco Mexicano, la más completa base de datos genéticos del paísCINVESTAV/ UGA-LANGEBIO

El trabajo de investigación comenzó en 2017, cuando el Consejo Nacional de Humanidades, Ciencias y Tecnologías (CONAHCYT), de México, y la Fundación Newton, del Reino Unido, entregaron recursos, por un millón de libras esterlinas, al grupo de investigadores. El objetivo: caracterizar genéticamente las primeras muestras cuyos datos genómicos conforman ya un banco de información nacional con más de 1.8 millones de marcadores genéticos. Estos marcadores, disponibles en el Archivo Europeo del Genoma-Fenoma, son secuencias o segmentos de ADN útiles para identificar genéticamente a un individuo o una población, asociar genes con una enfermedad o rasgo hereditario, o bien, estudiar la diversidad genética. 

Las muestras para el estudio fueron obtenidas de la Encuesta Nacional de Salud 2000, realizada por el INSP, en la cual se colectaron tomas biológicas y datos biomédicos de más de 40,000 individuos oriundos de aproximadamente 900 localidades de las 32 entidades del país. De ese total de muestras se seleccionaron 6,000 para el análisis del ADN por parte del grupo de investigación que utilizó una combinación de plataformas genómicas de alta tecnología disponibles en el LANGEBIO, en Irapuato, Guanajuato.

Según Conexión CINVESTAV, la importancia de este estudio radica en que “se trata del primero en considerar la totalidad del territorio nacional, por lo que busca ser una herramienta fundamental para la investigación, tanto biomédica como poblacional, en el país”. De esta manera, “El Biobanco Mexicano tiene la capacidad de convertirse en una referencia poblacional para múltiples estudios genéticos futuros, no sólo de carácter médico (epidemiológico o clínico), sino también demográfico y evolutivo, esto al poder emplearse como muestras de controles (comparativos) en estudios de asociación a enfermedades o rasgos biomédicos”.

Biobanco MexicanoCINVESTAV/ UGA-LANGEBIO

Respecto a los estudios genéticos de carácter demográfico y evolutivo, ya es posible tener un panorama nacional de cómo están estructuradas las ancestrías (orígenes étnicos en función de la genética) por regiones y entidades de México. 

Así, por ejemplo, se ha podido identificar la presencia de genes asiáticos en las muestras de habitantes de Guerrero y Baja California, y de genes africanos en los pobladores de Veracruz y Tabasco, así como una considerable diferenciación genética en la península de Yucatán respecto al resto del país, asimismo, una menor variación genética en la población con mayor ancestría indígena.

Para el doctor Moreno Estrada, “la caracterización genética del Biobanco Mexicano constituye una contribución sumamente importante para cerrar la brecha de la disparidad de datos de poblaciones poco representadas y, al mismo tiempo, pone a México en el mapa mundial de estudios genómicos de gran escala”.

Por Agencias