Jim Ryan, CEO de Sony Interactive Entertainment (SIE), comunicó que despedirá a más de 900 colaboradores de PlayStation y cerrará uno de sus estudios de desarrollo. La medida es parte de un plan de reestructuración que también considera la cancelación de diversos juegos.
El ejecutivo confirmó la noticia a través de un correo electrónico. Detalló que los recortes afectarán al 8% de su fuerza laboral a nivel mundial. Colaboradores de todas la regiones se verán perjudicados. No obstante, Reino Unido concentrará gran parte de los despidos. La compañía japonesa decidió cerrar el London Studio de PlayStation por completo, anunció la eliminación de puestos en el estudio Firesprite y reducciones en varias áreas de SIE en aquel mercado.
Ahora que cualquier compañía de videojuegos puede promocionar en internet sus grandes lanzamientos, ya nadie necesita de los grandes eventos como el E3.
Los trabajadores en Estados Unidos considerados en el reciente recorte serán notificados hoy. En el resto de los países, se dará inicio a conversaciones con quienes “estén potencialmente en riesgo” o resulten afectados en el proceso.
Ryan justificó la acción alegando que la evolución del panorama económico y la forma en la que se desarrollan, distribuyen y lanzan nuevos productos han obligado a la compañía a reestructurar sus operaciones. “Tuvimos que dar un paso atrás, mirar nuestro negocio de manera integral y avanzar enfocándonos en la sostenibilidad a largo plazo. El objetivo es optimizar nuestros recursos para garantizar nuestro éxito continuo y nuestra capacidad de brindar las experiencias que los jugadores y creadores esperan”, sostuvo.
En una publicación alterna, Hermen Hulst, director de PlayStation Studios, detalló que la reducción de la fuerza laboral afectará a los estudios Guerrilla Games, en Europa, estudios Insomniac Games y Naughty Dog, con sede en Estados Unidos, y a los equipos de tecnología, creatividad y soporte de toda la unidad. Aseguró que Sony cancelará algunos videojuegos en etapas de producción.
“Evaluamos títulos en varias etapas de desarrollo y decidimos que algunos de estos no avanzarán. La decisión no es un reflejo del talento o la pasión de los miembros del equipo. A veces, un proyecto se inicia con las mejores intenciones antes de que las modificaciones dentro del mercado o la industria resulten en un cambio de plan”, lamentó.
Hiroki Totoki, presidente de Sony, advirtió hace algunos días que el enfoque de negocio de la empresa estaba en un proceso de reinvención. Advirtió en una llamada con accionistas que este año no habría lanzamientos importantes con el objetivo de adaptar los activos actuales a una visión multiplataforma.
Cambios en la industria de los videojuegos
Sony está lejos de ser la primera o la última empresa que anuncia recortes. La industria de los videojuegos atraviesa uno de sus momentos más complejos derivado de los nuevos intereses y hábitos de los jugadores, la creciente competencia y las presiones macroeconómicas.
Microsoft Gaming despidió a 1,900 personas a mediados de enero. La cifra fue equivalente al 8% de su plantilla. Phil Spencer, CEO de la división, dijo que la acción era parte de una nueva estructura de “costos sostenible”. Señaló que la empresa “continuará invirtiendo en áreas que harán crecer nuestro negocio y respaldarán nuestra estrategia de llevar más juegos a más jugadores en todo el mundo”. Unity Technologies confirmó ese mismo mes que eliminaría el 25% de sus puestos laborales para impulsar su rentabilidad a largo plazo. Esta es la mayor ronda de recortes en la historia de la compañía. El proceso concluirá a finales de marzo.
La plataforma de monitoreo Game Industry Layoffs calcula que se registraron 10,500 despidos durante 2023. Al cierre de enero de este año, estimó que se habían eliminado 5,900 posiciones laborales dentro del sector. Los analistas sugieren que la tendencia responde a la necesidad de los desarrolladores y estudios de adaptarse al entorno móvil y a la demanda de juegos como servicio. Se calcula que, este año, los gamers destinarán hasta 111,400 millones de dólares en la compra de juegos de videos para móviles, compras dentro de la aplicación y el pago de suscripciones a servicios relacionados, de acuerdo con estimaciones de Data.ai, plataforma de análisis de datos móviles.
