Algunos atletas sonorenses siguen en la pelea por lograr un boleto que los lleve a Juegos Olímpicos de París 2024 y una de ellas es la oriunda de Ciudad Obregón, Daphne Guillén, quien no quita el dedo del renglón en su sueño y meta.
La pesista sonorense, tiene todavía dos eventos en las que puede dar las marcas necesarias para ganarse su lugar en el seleccionado nacional que estará en la capital francesa del 26 de julio al 11 de agosto.
Con ello en mente, la joven de 21 años de edad, forma parte del equipo de la Federación Mexicana de Levantamiento de Pesas, que disputará el Campeonato Panamericano de la especialidad en Caracas, Venezuela, del 23 al 29 de febrero, mismo que funge como preolímpico.
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“Ayuda mucho para poder dar la marca. Me encuentro muy bien, recuperando, saliendo de una lesión de muñeca, voy volviendo y gracias a Dios he ido mejorando en mis entrenamientos. Fue algo complicado, porque fue volver a agarrar la barra, pero rápido me pude volver a poner en mis marcas”, comentó Guillén, quien viene saliendo de una lesión de muñeca.
Con tan sólo 21 años de edad, logró dar marcas para competir en el ciclo olímpico y ahora, con las credenciales suficientes a nivel internacional, busca el boleto a París.
“Me siento muy motivada, porque con 21 años pude entrar al proceso olímpico, para mí eso siempre fue un sueño y claro, todavía tengo la vista en que se puede lograr la marca”.
“Todavía tengo otro evento aparte de Venezuela y siempre he dicho que el trabajo duro gana y esto echándole muchas ganas y motivándome para poder dar esa marca y clasificar a mis primeros Juegos Olímpicos, primeramente Dios”, comentó para El Sol de Hermosillo.
La subcampeona mundial juvenil y ganadora del Premio Estatal del Deporte en 2022, ha tenido un crecimiento meteórico sobre los entarimados, pero no ha sido un camino fácil, luchando con lesiones y malos momentos, situaciones que la han formado para ser una de las pocas sonorenses en aspirar a la cita olímpica, actualmente.
“Es muy emotivo para mí, era un sueño y ahora lo estoy viviendo, no ha sido fácil, pero me doy cuenta que siempre he podido dar más, a diferencia de ese mundial cuando estaba chiquita, me di cuenta que podía dar más y quería ser la mejor y creo que tener esa visión me ayudó a crecer tan rápido y poder lograr el proceso olímpico a mis 21 años”.
Buscando la marca
La atleta tiene desde la semana pasada entrenándose en el CNAR de la Ciudad de México, pero se mantiene entrenando de manera regular en su natal Ciudad Obregón, donde se ajustaron a un plan para salir adelante en su recuperación.
“Hemos tenido que transformar la fuerza, en el momento en el que no podía levantar por la lesión, me fortalecí mucho con sentadilla y jalones, ya que tuve un esguince de muñeca y me desgarré un tendón, pero en estos meses fue transformar toda esa fuerzas en los levantamientos y gracias a Dios no se fue mi fuerza, yo la siento y va saliendo poco a poco, porque no podía empezar de golpe”, aclaró.
De igual manera, explicó que para ganarse su boleto, debe superar las marcas registradas por una pesista jalisciense, quien dio 98 en arranque y 125 kilos en envión, “yo tengo que dar una marca más alta; tengo en la mira como un 103 en arranque y 128 en envión, para poder clasificar; sería la cereza del pastel”.
Sin embargo, Venezuela no es la única parada, pues, si en dado caso no da las marcas en el Panamericano, todavía tendrá una última oportunidad en el clasificatorio en Tailandia, a finales del mes de marzo.
Una meta por cumplir
Por su parte, la joven obregonense también habló sobre el camino que ha tenido que ir sorteando, donde su impulso por seguir adelante y no rendirse ha sido clave en su evolución como pesista y, aunque no suele pensar mucho en sus logros, tener la oportunidad tan cerca de unos Juegos Olímpicos, es algo que no se puede ignorar.
“Hasta este año me va cayendo el veinte, sí clasifico sería para toda mi familia y amigos que me conocen que saben qué hay detrás, mis fisioterapeutas, mi psicólogo, sería algo que me va cayendo y apenas voy captando. Una cuando está haciendo las cosas se enfoca y se siente bonito el hecho de tener la oportunidad de poder ir”.
“Siento que lo esencial es nunca rendirse, aunque todo se ponga difícil, porque muchas veces nos rendimos muy fácil y las cosas bonitas en la vida cuestan y hay que seguir enfocados”, mencionó.
Por último, les dejo un mensaje a la afición que se junta apoyar a los atletas, no sólo de Sonora, sino de todo el país, pues espera que la halterofilia se gane un reconocimiento que merecen.
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“Que nos vean, porque es algo que nos cuesta mucho día con día, es un deporte muy padre, gana el más fuerte”.
“Falta mucho que nos reconozcan a nosotros como pesistas, no es un deporte tan famoso, que conozcan un poco más de esta disciplina, es algo muy padre, hay mucha historia detrás como Soraya Jiménez y muchos otros pesistas de México”, finalizó.
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