De todas las cosas totalmente deprimentes que se publican en los medios de Hollywood en un día cualquiera, esta tiene que ser una de las peores: «No es nada buena, y fue tan triste verla… así no es como Coppola debería terminar su carrera como director«.

Esta frase es la respuesta a un proyección temprana de Megalópolis, de Francis Ford Coppola, una epopeya de ciencia ficción de 120 millones de dólares que el legendario director de El Padrino lleva casi cuatro décadas intentando realizar. La cita, de un «jefe de estudio» anónimo, se publicó en un artículo de The Hollywood Reporter en el que se la presentaba como el tipo de película en la que nadie quiere invertir dinero porque (supuestamente) no tiene potencial de taquilla. Aunque esa cita era, en el lenguaje periodístico, el remate, la verdadera gracia venía en el apéndice del final: «Esta historia ha sido actualizada para incluir que Megalópolis se estrenará en Cannes». Boom.

Larga vida a Coppola

El artículo de THR no indica el sexo del ejecutivo del estudio citado, pero voy a aventurarme: Señor, ¿de qué coño está hablando usted? Aunque Megalópolis sean dos horas y 15 minutos de Adam Driver (sí, es el protagonista) haciendo una obra con muñecos de papel, Coppola ha sobrevivido a cosas mucho peores. Esto no acabará con su carrera. En todo caso, citas como esta señalan el fin de Hollywood, o al menos la necesidad urgente de un reseteo.

A principios de esta semana, Bilge Ebiri escribió un alegato en Vulture, declarando que «Hollywood está condenada si no hay espacio para las megalópolis«, mientras que Matt Zoller Seitz adoptó un enfoque ligeramente diferente, dirigiéndose directamente a Francia desde su escritorio en RogerEbert.com y rogando a los participantes en el Festival de Cannes que aplaudieran la película y salvaran a Estados Unidos de sí mismo. Ambos señalaron que muchas de las películas de Coppola (Drácula de Bram Stoker, One from the Heart) no conectaron plenamente con el público ni con la crítica cuando se estrenaron. Esta última estuvo a punto de llevarle a la bancarrota, justo después de hipotecar todo lo que poseía para financiar Apocalypse Now, que actualmente figura, junto con otras películas de Coppola, entre las 100 mejores películas de todos los tiempos, según el American Film Institute.

La venganza de los nerds

Me gustaría hacer un llamado de otro tipo: Nerds, unámonos. Tenemos una larga historia de crowdfunding y envío de cartas para manifestar los proyectos en los que Hollywood se ha tambaleado. Bjo Trimble salvó Star Trek. Credence, Veronica Mars, The People’s Joker… hemos recaudado dinero para todas ellas. Los estudios no creen que Megalópolis sea financiable; puede que no satisfaga el algoritmo de ningún servicio de streaming. Pero qué más da. Una petición en línea con suficiente respaldo puede proporcionar una campaña de marketing que rivalice con la multimillonaria que Coppola ha imaginado. Vale la pena intentarlo.

Debo decir que no he visto Megalópolis, ni puedo dar fe de su calidad. Cuenta con Shia LaBeouf, lo que da que pensar. Pero también cuenta con Nathalie Emmanuel, de Game of Thrones, y además con Aubrey Plaza. Los detalles sobre el argumento son escasos, pero parece que trata de una ciudad neoyorquina en decadencia que un arquitecto idealista (Driver) quiere convertir en utopía, aunque el alcalde de la ciudad (Giancarlo Esposito) se interpone en su camino. «Nueva Roma» es el nombre de la ciudad, así que seguro que suscitará más debates sobre el Imperio Romano. Alguien que vio una de las primeras proyecciones dijo que era «una locura».

«Hollywood se ha quedado sin ideas»

Incluso si Megalópolis resulta ser, entre comillas, «mala», puede que no sea palpable en el cine moderno. La mayor parte de la mejor ciencia ficción es confusa. Miren Jupiter Ascending. 2001: A Space Odissey es locamente rara. También es un clásico. La ficción especulativa existe como género para imaginar el futuro. Si Coppola, que al parecer empezó a escribir la película en los años 80 y la financió con los ingresos de la venta de su negocio de vinos, ha puesto toda la carne en el asador en este proyecto, es que se trata de una visión que vale la pena ver. Aunque me encantaría ver una epopeya original de un nuevo y brillante desconocido, si Netflix estuvo dispuesto a arriesgarse con Rebel Moon de Zack Snyder, alguien debería hacer lo mismo con esto.

En realidad, Francis Ford Coppola no necesita nuestra ayuda. Es Francis Ford Coppola. Alguien distribuirá su película. A Cannes probablemente le encantará. El propio guionista y director lo dijo esta semana a The Daily Beast: «Lo mismo le pasó a Apocalypse Now«, y añadió que «Megalópolis resistirá el paso del tiempo», pero «Hollywood se ha quedado sin ideas». Dentro de treinta años, la industria puede estar confiando en la IA para escribir y dirigir Terminator 10, y Megalópolis será un clásico de culto.

Artículo publicado originalmente en WIRED. Adaptado por Mauricio Serfatty Godoy.

Por Agencias

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