La Inversión Fija Bruta, que es el gasto que realizan las empresas públicas y privadas en equipo, maquinaria y construcción, se incrementó 0.5% en términos reales, a tasa mensual en julio de 2023, informó el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi).
Por componente, los gastos en construcción crecieron 1.9% a tasa mensual y en maquinaria y equipo, tanto de origen nacional e importado, disminuyeron 0.9% en julio pasado y con datos ajustados por estacionalidad.
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En nuestra opinión, el sector sigue impulsado por el gasto gubernamental en obras clave como el Tren Maya y Corredor del Istmo de Tehuantepec, donde creemos que existen mayores esfuerzos por terminarlas antes de que finalice el sexenio, así como por la consolidación de una mayor demanda por espacios industriales por el nearshoring”, comentaron analistas de Banorte.
En su acumulado enero a julio de 2023, la inversión productiva reportó un crecimiento anual de 20.3 por ciento.
Por su parte, la inversión pública reportó un alza de 16.5 por ciento en el acumulado de enero a julio; en construcción el crecimiento fue de 20.3 por ciento y en compra de maquinaria y equipo de 0.7 por ciento.
Gabriela Siller, directora de Análisis de Banco Base, comentó que considerando el crecimiento acumulado en los primeros sietes meses del año, el crecimiento esperado para la inversión fija bruta se mantiene en 18 por ciento, mostrando una clara aceleración como consecuencia de la inversión pública en proyectos prioritarios del gobierno.
Sin embargo, advirtió que existen riesgos que podrían afectar la inversión en México, entre los principales destacan: la posibilidad de sanciones comerciales impuestas por Estados Unidos debido a controversias dentro del T-MEC; la incertidumbre por las políticas económicas internas y la inseguridad pública.
CONSUMO, CON RETOS
Por componentes, el consumo de bienes y servicios de origen nacional ascendió 0.3% y el de bienes de origen importado cayó 1.1 por ciento.
Para Banorte el consumo debe enfrentar mayores presiones inflacionarias, con condiciones climáticas adversas y alzas en los precios de los energéticos; tasas de interés altas por mayor tiempo, impactando las decisiones también de inversión y ciertas dudas sobre el dinamismo de la economía global.
A pesar de estos retos, confían en que la demanda doméstica se mantendrá como un motor relevante para la actividad no sólo en lo que resta del año sino también en 2024.
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*mcam
Con Información de Excelsior
