Cuando Jared Serna tenía tres años de edad, su padre y su abuelo lo llevaban a practicar beisbol y su natal Guaymas, Sonora. Pero Serna lloraba y pataleaba porque no le gustaba el “Rey de los Deportes”.

Cuando alcanzó los 11 años de edad, Serna ya estaba más adentrado a la pelota, ya sabía lo que era una firma profesional y, lo más importante, ya le gustaba el beisbol y quería entrenar fuerte para tener una carrera dentro de dicho deporte.

Ahora, Serna tiene 21 años de edad, es parte de los Yanquis de Nueva York y está viviendo una temporada de ensueño en la Liga Estatal de Florida (Clase A Media) donde lidera varios departamentos ofensivos como el de cuadrangulares(18), carreras producidas (66) y carreras anotadas (67)

Con su apenas 1.68 metros de estatura, el poder ofensivo de Serna tiene impresionados a los coaches, managers y scouts de los Yanquis y su gran año ya lo metió a la lista de los 15 mejores prospectos de la novena neoyorquina, según la prestigiada revista Baseball America.

SUS INICIOS

Serna pertenece a una familia sonorense amante del beisbol, pero en la que ningún integrante jugó profesional. Su abuelo es un gran seguidor de los Yanquis de Nueva York y su padre era aficionado a los Dodgers de Los Ángeles, hasta que Jared firmó con los “Mulos”.

“Empecé a jugar desde los tres años,. No me gustaba el beisbol, lloraba cuando me dejaban ahí, pero mi papá y mi abuelo decidieron llevarme.

“Hasta los 10 años era como un hobbie, ya a partir de los 11 años supe lo que era una firma profesional y comencé aentrenar fuerte y a prepararme para lograrlo”, recuerda.

¿Cuándo surge el interés de un equipo profesional por firmarte?

“A los 15 años comencé a llamarle la atención a equipos profesionales de México (Diablos Rojos del México, Leones de Yucatán y Toros de Tijuana) y entonces me di cuenta que podía lograr una firma. A los 16 años el scout Enrique ‘Kiki’ Padilla de los Toros de Tijuana me fue a evaluar a Guaymas y en 2017 me firmaron”.

Serna reportó en 2018 a la Academia de los Toros de Tijuana, ahí se mantuvo entrenando con la ilusión de que pudiera llamar la atención de un equipo de Grandes Ligas y poder ser firmado en el proceso de firmas que se abriría el 2 de julio.

Mostró sus habilidades en un par de Show Case que los Toros de Tijuana realizaron para mostrar el talento de sus prospectos ante scouts de Grandes Ligas, pero fue justamente en 2018 cuando la oficina del Comisionado de Grandes Ligas y la Liga Mexicana de Beisbol (LMB) entraron en nuevas negociaciones para la transacción de peloteros y todas las firmas se detuvieron,

Llegó el 2019 y el 17 de julio los Yanquis de Nueva York, mediante el scout dominicano Raúl González, concretaron la firma de Serna, quien de inmediato viajó a República Dominicana para incorporarse a la Liga Dominicana de Verano (DSL).

La DSL estaba ya en su último mes de actividad por lo que Serna no pudo ser activado y sólo se mantuvo entrenando en Dominicana.

DEBUT PROFESIONAL

Cuando todo indicaba que Serna debutaría como pelotero profesional en 2020, la pandemia detuvo toda actividad en el verano y no pudo reportar a ninguna sucursal de los Yanquis, pero el destino le tenía preparado un mejor debut.

Llegó el invierno y fue invitado al campo de entrenamiento de los Charros de Jalisco en la Liga Mexicana del Pacífico (LMP). Serna, sin haber tomado un solo turno como profesional, demostró su talento en las prácticas y terminó por llenarle el ojo a los Charros, quienes lo incluyeron en el roster de inicio de temporada.

“Era el último día de entrenamiento y los Charros iban a hacer algunos cortes en el roster. Yo tenía la esperanza de quedarme en el equipo porque creo que hice buen trabajo, entonces ese último día estaba fildeando en los jardines y me llamaron al dugout. En el camino me encuentro a Henry Urrutia, quien me dijo ‘felicidades, chiquito, te vas a quedar en el equipo’. Llegué al dugout y me dieron a firmar el contrato. Me emocioné mucho, era un sueño para mi inicar en el roster de los Charros”, recuerda.

Su debut llegó el 16 de octubre de 2020 entrando en la octava entrada como emergente por Amadeo Zazueta. Serna enfrentó a Oliver Cervantes, relevista de los Sultanes de Monterrey, y conectó doblete para la banda contraria.

“Recuerdo muy bien que debuté contra Sultanes con un doblete de swing arrepentido y la pelota se fue para el jardín derecho. Era pandemia, no había mucha afición, y sí estaba un poco nervioso”, señala.

Ahora Serna, ya con tres temporadas de experiencia en la Liga Mexicana del Pacífico, quiere jugar este invierno y pelear por la titularidad con los Charros de Jalisco.

Sin duda un debut profesional curioso, porque su primer juego en la pelota rentada no fue ni con Toros de Tijuana, que fueron los que lo firmaron al profesionalismo, ni con los Yanquis de Nueva York, quienes un año atrás también se habían hecho de sus derechos.

SU ASCENSO EN YANQUIS

En el 2021 la actividad regresó en todo el sistema de sucursales de Grandes Ligas y Serna fue enviado a la Liga Dominicana de Verano (DSL) para iniciar su carrera con la franela de los Yanquis de Nueva York.

Tuvo un debut discreto al batear para .238, con tres cuadrangulares y 16 carreras remolcadas, pero siempre siendo titular como segunda base y en ocasiones fungiendo como short stop.

Al año siguiente fue ascendido a Liga de Novatos (RookieLeague), donde sus números mejoraron en demasía al batear para .302, con seis vuelacercas y 28 producidas. Terminó el año en Clase A en donde apenas disputó 11 juegos.

Ya este año su asignación fue directamente en Clase A con los Tarpons de Tampa, y su desempeño ha sido tan destacado que ya fue incluido entre los mejores 15 prospectos de los Yanquis por la afamada revista BaseballAmerica.

Serna está destrozando la Liga Estatal de Florida, donde es líder de cuadrangulares (18), carreras producidas (66), anotadas (67), tercero en slugging (.478) y cuarto en dobles (18).

“Cuando terminé el invierno pasado con Charros comencé una fuerte preparación, pues me lesioné al sufrir un esguince pero en enero ya estaba listo. Durante febrero y marzo me preparé para venir a la temporada en Clase A. El preparador Luis Atwell, que es mi trainer personal, me ayudó a trabajar fuerte en Guaymas y ahí están los resultados”, revela Serna.

¿Qué te dicen tus coaches del gran desempeño que estás teniendo?

“Asombrado scon el trabajo y el año que estoy teniendo, porque exploté de pronto con batazos, cuadrangulares, producidas. Todo mundo está asombrado porque soy un jugador bajito que no proyectaba tantos jonrones.

“También me dicen que cómo le hago para controlar la presión del juego. Acá nos ponen sensores en la espalda para medir las pulsaciones, velocidad de correr, etc, y me dicen que los resultados indican que cuando bateo estoy mucho más tranquilo que mis compañeros”.

¿Jugar invierno en México te ha ayudado?

“Me ha servido demasiado por la experiencia de los jugadores con los que convivo, quienes me dan consejos y eso me ayuda. Yo creo que es todo en conjunto, el trabajo de fuerza, el trabajo de bateo, lo mental, la experiencia”.

Por Agencias